martes, 7 de marzo de 2017

Un blog para mis alumnos

En realidad, yo ya uso blogs con mis alumnos, dos para ser exactos: B.log.ia 2.0 y ¿Entiendes la ciencia?

Los dos surgieron como un repositorio de apuntes para complementar los materiales de clase (no utilizo libros de texto) y fueron creciendo poco a poco, uno mucho más que el otro. Al cabo del tiempo el pequeño acabó cambiando poco a poco, y sirvió para difundir la ciencia y una de mis aficiones en relación con ella: el estudio de su historia.

Eso sí, luego llegó la falta de tiempo, la prisa, el estrés... Ahí andan los dos, un poco muy abandonados, sin que su autor les haga demasiado caso desde hace tiempo. Ya volveré.

Más que esperar algo de mis alumnos, fueron ellos quienes me plantearon la necesidad del blog, o de algo parecido. Mis materiales de clase son, básicamente, presentaciones de powerpoint, enriquecidas en general con vídeos y animaciones. Aunque estaban colgadas en la red, mis alumnos pensaban que no eran el mejor recurso para aprender: algunos, muchos, decían que preferían leer a reconstruir la clase, así que el blog se prestaba bien al formato: básicamente un texto a partir del cual leer y estudiar, imprimible y/o reproducible en la red...

Eso es todo. Al final, la mayor innovación educativa, desde mi punto de vista, es tratar de adecuar nuestra enseñanza al modelo de aprendizaje de nuestros alumnos y, si podemos, tratar de modificar ese estilo de aprendizaje para que sea más eficaz. No sé si lo consigo, pero creo que lo intento.

viernes, 20 de enero de 2017

¿Qué producto cultural define mi acción docente diaria?

Hombre, pues no sé si tendrá que ver con la realidad, pero me gustaría definirme como un agricultor: preparar la tierra, sembrar, cuidar... Y luego, ver cómo crece lo que se ha estado cultivando. Igual que pasa con el labrador el mérito nunca es tuyo, quien crece es la planta, que acabará por dar fruto, lo que haces día a día es solo ayudar.